Regresando a Temple Bar
Ahora que en Libertad Digital estamos celebrando los primeros 25 años de nuestra historia, nos ha entrado a todos un ansia irrefrenable por desempolvar fotos e historias de aquellos días.
La mía, necesariamente, pasa por aquel viejo piso de Conde de Aranda y el Temple bar de Dublín. Dos lugares separados por miles de kilómetros y, en apariencia, sólo en apariencia, por centenares de años. Dos universos tan distintos pero tan importantes en mi vida.
En Conde de Aranda, la antigua sede de LD, se forjó la periodista, se cultivó la amistad y el sentimiento de pertenencia al Grupo. 25 años después, no estamos todos pero sí muchos de los que coincidimos en aquel piso de techos altos, tarima crujiente y olores imposibles. The Temple Bar es el lugar que conecta mi vida profesional con la personal. Es el lugar donde pasamos de la amistad al amor y donde soñamos con hacer realidad nuestros sueños.
25 años después, LD continua formando parte de mi vida e Irlanda, también.Parte de mi familia está allí, mi hija ya tiene la suya irlandesa, también cerca de Dublín, soñamos con regresar al Trinity, al Temple bar y, aunque no podamos estar allí, y no hayamos regresado desde entonces, siempre, siempre, lo evocamos.
25 años después, allí estoy otra vez. Regreso a
Temple bar.
Comentarios
Publicar un comentario